Escurrimos el prefermento y lo ponemos en un bol.
Añadimos las harinas y el cacao y mezclamos bien. En el centro, echamos el huevo y la mantequilla en pomada y amasamos.
Deshacemos la levadura en leche caliente, la echamos al resto de la masa y amasamos.
Añadimos el agua de azahar y la sucralosa y seguimos amasando, durante unos 10 minutos.
Formamos una bola y la colocamos en un bol engrasado con un poco de aceite. Cubrimos con film de plástico y dejamos levar hasta que doble su tamaño (1-2h) en un lugar fresco y seco. Yo lo meto dentro del horno apagado.
Dividimos la masa en 8 porciones más o menos iguales (75-80gr) y las colocamos sobre una bandeja con papel de horno, formando un rosco, sin apretarlas las unas contra las otras, ya que crecerán. Dejamos levar hasta que doblen su tamaño otra vez, durante unas 2h.
Precalentamos el horno a 200º, y mientras llega a la temperatura batimos un huevo y pintamos el roscón. Decoramos al gusto, yo con almendras laminadas, almendras en cubitos y pepitas de chocolate.
Horneamos a media altura durante 5 min a 200º y 15 min más a 180º.
Dejamos enfriar sobre una rejilla, ¡y listo!