Trituramos las galletas o los copos de avena y los mezclamos con la mantequilla derretida. Integramos bien hasta conseguir una pasta.
Forramos la base de un molde de 15-18cm de diámetro con papel de horno y vertemos la pasta de galletas, presionando con una lengua de gato para repartirla bien. Si forramos los bordes del molde con una tira de acetato, nos costará menos de desmoldar la tarta después.
Hidratamos las hojas de gelatina en agua fría.
En un cazo a fuego medio, ponemos la leche. Cuando esté caliente, escurrimos la gelatina y la derretimos. Añadimos las yemas de los huevos y mezclamos bien, cocinando un par de minutos a fuego medio.
Añadimos el turrón troceado y removemos hasta que se funda por completo. Es posible que queden trocitos, de las almendras del turrón. Si queremos que la mousse quede más fina, podemos triturar la mezcla con la batidora de mano. Apartamos del fuego, pasamos la mezcla a un bol grande y reservamos.
En un bol aparte, batimos la leche evaporada fría a velocidad alta, hasta que gane volumen y quede una consistencia similar a la de la nata semimontada. Yo lo hago con la <a href="https://amzn.to/2RY3W6m">kitchenaid</a> a velocidad 8.
Agregamos la leche montada al bol del turrón, en varias veces y con movimientos envolventes, poco a poco, metiendo la espátula hasta el fondo para que no se quede el turrón pegado en la base y se mezcle bien.
Montamos las claras de los huevos a punto de nieve (velocidad alta hasta que al dar la vuelta al bol no se caigan), a temperatura ambiente, y las añadimos al bol con la mezcla de la mousse, también en varias veces y con movimientos envolventes.
Vertemos nuestra mousse de turrón sin azúcar en el molde, sobre la base, o en vasitos individuales. Dejamos enfriar en la nevera durante 3-4h, hasta que cuaje bien.
Desmoldamos con cuidado, decoramos con trocitos de turrón y almendras, servimos, ¡y listo!